La agnosia visual primaria es un trastorno neurológico raro caracterizado por la pérdida total o parcial de la capacidad de reconocer e identificar objetos familiares y/o personas a través de la vista. Esto ocurre sin pérdida de la capacidad de ver realmente el objeto o la persona. Los síntomas de la agnosia visual ocurren como resultado del daño a ciertas áreas del cerebro (primario) o en asociación con otros trastornos (secundario).

Las personas con agnosia visual primaria pueden tener una o varias deficiencias en el reconocimiento visual sin afectar la inteligencia, la motivación y/o la atención. La visión está casi siempre intacta y la mente clara. Algunas personas afectadas no tienen la capacidad de reconocer objetos familiares. Pueden ver objetos, pero no pueden identificarlos con la vista. Sin embargo, los objetos pueden identificarse por el tacto, el sonido y/o el olfato. Por ejemplo, es posible que las personas afectadas no puedan identificar un juego de llaves a simple vista, pero pueden identificarlas al sostenerlas en sus manos.

Algunos investigadores separan la agnosia visual en dos grandes categorías: agnosia aperceptiva y agnosia asociativa. La agnosia aperceptiva se refiere a individuos que no pueden procesar correctamente lo que ven, lo que significa que tienen dificultades para identificar formas o diferenciar entre diferentes objetos (estímulos visuales). Es posible que las personas afectadas no puedan reconocer que las imágenes del mismo objeto desde diferentes ángulos son del mismo objeto. Las personas afectadas pueden ser incapaces de copiar (p. ej., hacer un dibujo) de un objeto.

La agnosia asociativa se refiere a las personas que no pueden relacionar un objeto con su memoria. Pueden describir con precisión un objeto e incluso hacer un dibujo del objeto, pero no pueden decir para qué es o para qué se usa el objeto. Sin embargo, si se le dice verbalmente qué es el objeto, una persona afectada podrá describir para qué se usa.

En algunos casos, las personas con agnosia visual primaria no pueden identificar a las personas conocidas (prosopagnosia). Pueden ver a la persona claramente y pueden describirla (p. ej., color de cabello y ojos), pero no pueden identificar a la persona por su nombre. Las personas con prosopagnosia pueden identificar a las personas por el tacto, el olfato, el habla o la forma en que caminan. En algunos casos raros, las personas afectadas no pueden reconocer su propia cara.

Algunas personas tienen una forma de agnosia visual primaria asociada con la pérdida de la capacidad de identificar su entorno (agnosia de pérdida de familiaridad ambiental). Los síntomas incluyen la incapacidad de reconocer lugares o edificios familiares. Las personas afectadas pueden describir un entorno familiar de memoria y señalarlo en un mapa.

La agnosia primaria se asocia con daño bilateral del flujo visual ventral, incluidas las circunvoluciones lingual y fusiforme.

La agnosia visual primaria se puede distinguir de otros trastornos visuales, como la simultanagnosia, que se caracteriza por la incapacidad para leer y la incapacidad para ver el entorno como un todo. El individuo afectado puede ver partes de la escena circundante, pero no la totalidad. Hay una incapacidad para comprender más de una parte de una escena visual a la vez o para coordinar las partes.

En casos raros, es posible que las personas con agnosia visual primaria no puedan reconocer o señalar varias partes del cuerpo (autotopagnosia). Los síntomas también pueden incluir la pérdida de la capacidad de distinguir la izquierda de la derecha.

La agnosia visual primaria es un trastorno neurológico raro que se produce como resultado de un daño en el cerebro. Los síntomas se desarrollan debido a la incapacidad de recuperar información de aquellas áreas dañadas que están asociadas con la memoria visual. Las lesiones pueden ocurrir como resultado de una lesión cerebral traumática, accidente cerebrovascular, tumor o sobreexposición a toxinas ambientales peligrosas (p. ej., envenenamiento por monóxido de carbono). En algunos casos, es posible que no se conozca la causa del daño cerebral. Los síntomas pueden variar, según el área del cerebro afectada.

La agnosia visual también puede ocurrir en asociación con otros trastornos subyacentes (agnosia visual secundaria) como la enfermedad de Alzheimer, la agenesia del cuerpo calloso, MELAS y otras enfermedades que dan como resultado una demencia progresiva.

El tratamiento de la agnosia visual primaria es sintomático y de apoyo. Las personas afectadas pueden someterse a ejercicios o rehabilitación para volver a aprender sobre los objetos necesarios para la vida cotidiana. Los ejercicios y la rehabilitación para ayudar a recuperar los recuerdos perdidos también pueden ser útiles.

En casos de agnosia visual secundaria, el tratamiento de un trastorno subyacente puede reducir los síntomas y ayudar a prevenir más daño cerebral.

La agnosia visual primaria es un trastorno neurológico extremadamente raro que afecta a hombres y mujeres por igual. La primera descripción detallada de la agnosia visual en la literatura médica se produjo en 1890.